Los investigadores están trabajando en desarrollar la próxima generación de vacunas COVID-19, es decir, en forma de píldora y aerosol nasal.
En este momento, las vacunas contra el SARS-CoV-2 son inyectables. Varios fabricantes han comenzado el desarrollo inicial de una vacuna en aerosol nasal -declaró el doctor Javeed Siddiqui, cofundador y director médico de TeleMed2U-.
De las 13 empresas que trabajan en una vacuna en aerosol nasal, cinco se encuentran en los primeros ensayos clínicos. “Es emocionante. Habla de la innovación que los científicos, el gobierno y el mundo académico están trabajando para mejorar lo que tenemos -declaró el doctor William Schaffner, experto en enfermedades infecciosas de la Universidad de Vanderbilt y director médico de la Fundación Nacional de Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos-.
La solución que viene de Suecia
En un laboratorio en Medicon Village, uno de los parques científicos más grandes del sur de Suecia, la ingeniera especialista química Ingemo Andersson, trabaja sobre el prototipo de un inhalador de plástico pequeño, casi del tamaño de una cajita de fósforos. Su equipo trabaja en el diseño de este pequeño producto como alternativa poderosa para la lucha mundial contra el coronavirus, al permitir que las personas puedan comprar en la farmacia y adminstrarse en su casa versiones en polvo de futuras vacunas.
En paralelo otro desarrollo a cargo de Iconovo, una compañía especializada en la fabricación de inhaladores, está colaborando con una colega dedicada a la investigación de inmunología en Estocolmo, ISR, que ha desarrollado una vacuna de polvo seco contra el COVID-19.
Este dato implica un avance notable frente a las condiciones que se necesitan para almacenar las vacunas tradicionales aprobadas en el mercado que están disponibles y cuentan con el respaldo la Organización Mundial de la Salud (OMS), todas ellas administrables en forma líquida que deben mantenerse en condiciones de temperaturas mínimas de hasta -70° C, antes de trasladas a refrigeradores para que no pierdan efectividad.
En paralelo GreenLight Biosciences, empresas especializada en desarrollo biosustentables y TFF Pharmaceuticals, abocada a convertir más moléculas en terapias inhalables, se han asociado en la realización de estudios de viabilidad para una formulación en polvo estable en almacenamiento de una vacuna COVID-19 de ARN mensajero (m). Su objetivo es ampliar las opciones de distribución de la vacuna COVID-19 a nivel mundial mediante la creación de una formulación que podría reconstituirse fácilmente antes de la inyección y no requeriría una distribución y almacenamiento extremos de la cadena de frío.
Las empresas dijeron en su comunicado que, a pesar de que las vacunas de ARNm COVID-19 son las más rápidas de desarrollar, producir y adaptarse a nuevas variantes preocupantes, los requisitos de la cadena de frío para mantener su estabilidad aumentan. la complejidad de la distribución, el costo y restringe la distribución de vacunas a regiones y países con una infraestructura de cadena de frío limitada.
Según el acuerdo, GreenLight Biosciences está entregando sus materiales candidatos para el producto de ARNm COVID-19 a TFF que realizará el trabajo y las pruebas de formulación de factibilidad. TFF es una compañía biofarmacéutica en etapa clínica enfocada en desarrollar y comercializar productos farmacéuticos innovadores basados en su plataforma de tecnología patentada Thin Film Freezing (TFF). La plataforma está diseñada para mejorar la solubilidad y la absorción de medicamentos poco solubles en agua y es particularmente adecuada para generar partículas de polvo seco con propiedades dirigidas a la administración por inhalación.
El objetivo del trabajo de viabilidad es identificar una formulación de polvo seco óptima del producto de ARNm, que tenga una estabilidad superior, mantenga el tamaño de partícula del ARNm encapsulado, así como una alta eficiencia de encapsulación y tenga características de reconstitución rápida para inyección.
Las compañías dijeron que, si tiene éxito, esto debería hacer que las vacunas de ARNm estén disponibles para todo el mundo, ya que podría permitir que las vacunas se transporten en el refrigerador o incluso a temperatura ambiente en forma de polvo.
Fuente: https://www.infobae.com/